El entierro del Papa Francisco, que se celebra en la Plaza de San Pedro del Vaticano, marca uno de los eventos más multitudinarios y costosos de los últimos tiempos. Miles de fieles, líderes mundiales y representantes religiosos se han congregado para rendir homenaje al pontífice argentino, fallecido recientemente, en una ceremonia que combina solemnidad, tradición y estrictos dispositivos de seguridad.
Siguiendo las estimaciones basadas en precedentes históricos como los funerales de Juan Pablo II en 2005 y Benedicto XVI en 2022, el coste total de las exequias de Francisco podría situarse entre 4 y 6 millones de euros. Esta cifra incluye no solo el sepelio y los actos litúrgicos, sino también los gastos derivados de la seguridad, la logística, la organización de eventos públicos y las retransmisiones a nivel internacional.
Desglose de los principales gastos:
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Ceremonia religiosa: El servicio solemne en la Basílica de San Pedro y la Plaza de San Pedro requiere una planificación exhaustiva, con costes estimados en 500.000 euros.
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Dispositivo de seguridad: Ante la asistencia de decenas de jefes de Estado y de gobierno, el Vaticano, en coordinación con Italia, ha desplegado más de 5.000 agentes de seguridad, lo que representa un gasto cercano a 2 millones de euros.
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Eventos públicos y pantallas gigantes: Para permitir el seguimiento masivo de la ceremonia en Roma y en todo el mundo, se han instalado múltiples infraestructuras audiovisuales, estimadas en unos 500.000 euros.
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Logística y personal de apoyo: Entre organizadores, voluntarios, limpieza, asistencia médica y coordinación técnica, el coste ronda el millón de euros.
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Transmisiones internacionales: La cobertura global, que incluye equipos de grabación, producción y distribución de la señal a cientos de países, añade otros 500.000 euros.
Además, el impacto económico de este evento en la ciudad de Roma y el Estado Vaticano se refleja también en sectores como el turismo, la hostelería y el transporte, aunque en este caso con repercusiones positivas por el incremento de visitantes.
Una ceremonia histórica y de gran simbolismo
El funeral de un Papa siempre supone un momento de gran significado espiritual y geopolítico. En el caso de Francisco, primer Papa latinoamericano y figura reformista en muchos aspectos de la Iglesia, el acto adquiere una dimensión aún mayor.
El Vaticano ha querido mantener una ceremonia sencilla, siguiendo los deseos expresados en vida por el propio pontífice, pero la magnitud del evento ha hecho inevitable un operativo sin precedentes para garantizar el orden y la seguridad.
Francisco será sepultado en las grutas vaticanas, siguiendo la tradición de sus predecesores, en un sepelio que pasará a la historia tanto por su carga emocional como por su relevancia global.
Fotografías: OpenAi